El carácter italiano comienza a reflejarse en todos los aspectos de la tragedia del Costa Concordia. Apenas dos días han tardado los italianos en elegir a un villano (el capitán Schettino) y a un héroe que compense la balanza. En este caso se trata de Gregorio de Falco, el comandante de la Capitanía de Livorno.
Desde que trascendió la conversación entre ambos, en Italia no dejan de sucederse las reacciones a dicha comunicación. En ella, de Falco no da crédito a que Schettino haya abandonado el barco y le ordena que regrese. El momento culminante llega cuando, tajante, de Falco le grita: "Vada a bordo, cazzo!", que podría traducirse como "¡Suba a bordo, coño!". El grito, lleno de coraje, ha emocionado a los italianos, que ven en Gregorio de Falco la antítesis de Schettino: un hombre de honor que no abandonaría jamás el barco. Hasta tal punto que un grupo de jóvenes han diseñado unas camisetas con la frase ya mítica. El éxito ha sido tan rotundo que se les han agotado en pocas horas. "No contábamos con tanto éxito porque no lo hicimos para lucrarnos", comenta uno de los autores de la camiseta.
Por su parte, el nuevo héroe ya ha declarado que no quiere saber nada más del asunto y se ha limitado a decir que "abandonar el barco es desertar, es traicionar el Código Marítimo". Además, asegura que notó "por la voz" desde un primer momento que Schettino mentía. Pese a decir que no quiere saber nada mñas de la prensa, esta noche estará en el popular programa televisivo de debates 'Porta a porta'.
No hay comentarios:
Publicar un comentario