El parto se adelantó media hora y el pequeno Max llegó en el momento exacto. El nene australiano se convirtió en noticia en todo el mundo.
Mientras los más supersticiosos esperaban el fin de los tiempos a las 11:11 del día 11/11/11, el pequeño Max Benjamin Richards llegaba al mundo, en Australia, y de inmediato se convirtió en noticia en todo el mundo.
La coincidencia numérica que sucede una vez cada 100 años fue el momento exacto en que este bebé llegó al mundo, adelantándose media hora del horario previsto para el parto.
En lo que fue una verdadera maratón de entrevistas con la prensa, los padres del bebé, Ben Richards y Sarah, confesaron estar muy contentos y a la vez, cansados. Max nació sin ningún tipo de contratiempo en su salud en el Hospital Hawkesbury, ubicado en Nueva Gales del Sur, al noroeste de Sydney, según publica Contexto.
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